Medina se desplazará hasta la capital con el objetivo de convencer al ente Administrador de Estructuras Ferroviarias de modificar el proyecto inicialmente previsto para el paso del Tren de Alta Velocidad por nuestra localidad.
La alcaldesa morala peleará por conseguir que se adopten soluciones técnicas que permitan una mejor integración del tramo urbano del AVE en nuestra localidad. Para ello cuenta con el apoyo de todos los grupos políticos, a excepción de IU, quienes aprobaron su propuesta en el Pleno celebrado el pasado 11 de mayo.
Tal y como se expresaba en la propuesta de alcaldía, el actual proyecto contempla «una valla continua de alta seguridad de 2,70 metros de altura y con una longitud de al menos 900 metros lineales, a ambos lados de la vía, correspondiente al tramo comprendido entre el Paso Superior 12.0 (N-Va con Avenida de San Isidro) y la Estación de trenes, lo que constituye un impacto enormemente agresivo desde el punto de vista urbanístico y social de Navalmoral, separando radicalmente la zona norte de carácter residencial e industrial con la zona sur o centro urbano».
Y aunque en dicho proyecto –el actual- se proponen soluciones que minimizan el aislamiento entre ambas zonas, como «la construcción de dos pasos inferiores peatonales donde actualmente existen pasos a nivel, así como un paso inferior de viales bajo la Estación de Navalmoral que comunicara la N-Va con el Paseo de la Estación y la Carretera de Jarandilla», se entiende por la Corporación que tanto los pasos inferiores peatonales como las vallas de protección que se proponen, van a acarrear inconvenientes incuestionables de seguridad y conservación, la división visual absoluta del municipio y el sentimiento de incomunicación en ambos sentidos.
Por otra parte, Raquel Medina preguntará por estas medidas y trasladará la preocupación que existe por las deficientes conexiones ferroviarias que unen a Navalmoral, situada en una zona estratégica y privilegiada para lograr una mayor industrialización al ser el centro neurálgico que une Madrid con Badajoz y Lisboa y ser este el factor logístico decisivo en la implantación de industrias.